Erich Priebke, fue capitán de las SS y asistente de Herbert Kappler, en la Masacre de las Fosas Ardeatinas, en la que fueron asesinados 335 ciudadanos italianos. Al finalizar la guerra, escapó hacia Argentina. Vivió un corto lapso en Buenos Aires y luego se radicó en San Carlos de Bariloche.
En la década del ’90, en una entrevista a Esteban Buch, Priebke, reveló por primera vez su pasado. Su confesión motivó su extradición a Italia y su condena. Murió cumpliendo arresto domiciliario, en 2013.